Estamos condicionados a buscar en el mundo la fuente de nuestra satisfacción. Y cuando las cosas no salen como queremos, intentamos encontrar alguien o algo a quien culpar.
El intento de controlar es tratar de hacer que la vida funcione. Pero la vida ya funciona. Colocar la culpa fuera de nosotros es un intento mal guiado para recuperar una sensación de control.
El hecho es que nunca estamos al control. Nunca hemos tenido ningún control que podamos perder. No tenemos el control de nada fuera de nosotros mismos. La vida siempre ha venido sucediendo de acuerdo con sus propias reglas, no con las nuestras. Cuando entramos a cooperar completamente con la vida, puede parecer que estamos al control, pero en realidad estamos flyuendo armoniosamente con la vida.
- John-Roger con Paul Kaye
No hay comentarios:
Publicar un comentario